¿Cuál es la mejor posición para dormir?

Aunque solemos tener una posición para dormir preferida, lo cierto es que durante la noche es muy raro que nos mantengamos todo el tiempo en la misma postura. Ya que durante el descanso solemos cambiar, de forma inconsciente, de posición varias veces. Existen tres posiciones en las que nuestro cuerpo cae de forma natural: boca arriba, de lado y boca abajo.

Acostarse boca arriba (posición decúbito supino) es una buena elección, ya que la espalda es un soporte natural de nuestro cuerpo. En esta posición se puede reducir el dolor crónico, los síntomas de alergia e incluso reducir las arrugas faciales. Dentro de esta postura hay dos variaciones muy utilizadas para dormir:

- Postura del soldado: en la que el cuerpo se sitúa en decúbito supino y coloca ambos brazos estirados a los lados. Esta postura suele favorecer el ronquido y no suele ser muy aconsejable para personas con sobrepeso.

- Estrella de mar: nos acostamos boca arriba y extendemos brazos y piernas como si fuéramos una estrella. En esta postura ocupamos prácticamente toda la extensión de la cama.

Aunque existen casos en los que puede ser desaconsejable dormir en esta posición, como personas con sobrepeso o problemas de reflujo, es una opción saludable y de apoyo para muchas personas. Algunos de los beneficios de dormir en esta posición son:

- Alivio del dolor de espalda: para algunas personas acostarse sobre su espalda les ayuda a aliviar su malestar y conciliar el sueño.

- Dolor de cuello: dormir en decúbito supino puede ayudar a reducir los dolores y molestias del cuello, al tener un mejor soporte.

Para dormir boca arriba, el secreto es mantener una postura lo más simétrica posible, evitando colocar los brazos en diferentes posiciones, ya que podría afectar a la alineación de la columna.

Si hay una postura que sin duda es la favorita para dormir, esa es de lado. Dormir de lado ayuda a reducir el dolor, la acidez estomacal, además de los ronquidos al dejar circular mejor el aire. Es una posición bastante cómoda para el descanso y hay varias posturas:

- Fetal: es quizás la postura lateral más utilizada para dormir, y consiste en acurrucarse aproximando brazos y piernas.

- Tronco: el cuerpo se coloca de costado, muy estirado y formando una línea recta. Su principal ventaja es que la columna se mantiene recta, por lo que es muy recomendable para aquellos que sufren de problemas y dolores de espalda.

- El nostálgico: en esta postura nos acostamos de lado, sobre un brazo o con ambos brazos extendidos hacia delante. La ventaja que tiene en nuestro descanso es el alivio de la acidez, reflujo y apnea del sueño.

Dormir de lado es beneficioso para nuestra salud, en especial con ciertas dolencias o etapas de nuestra vida. En el embarazo favorece el descanso y alivia el dolor de las articulaciones, el reflujo, la compresión de los órganos y la frecuencia cardiaca. 

Para las personas que sufren de acidez o reflujo, dormir en esta posición les ayuda a encontrar cierto alivio, especialmente si elevamos un poco la cabeza para impedir que suban los jugos gástricos. 

Esta postura es ideal para quienes roncan o tienen apnea del sueño, así como para aliviar los dolores de espalda.

Dormir en esta posición es quizás la opción menos aconsejable para el descanso, la columna no tiene el apoyo o soporte adecuado para el descanso, llegando a desalinearse debido al hundimiento de las caderas y el estómago. 

Por otro lado, el tener que girar el cuello para dormir hace que éste tenga una posición forzada durante la noche y con ello, dolores o tirones en el cuello. Es la posición en la que más forzamos nuestro cuerpo al dormir, por lo que, quizás, no sea la más indicada si queremos tener un sueño de calidad.

Lo cierto es que, no existe una posición más adecuada que otra para dormir, al final la posición perfecta es aquella que mantenga tu cuerpo alineado, pero sin forzar, permita el descanso y un estado saludable. Lo ideal, si no sabes cuál es la postura o posición más adecuada para ti es que pruebes varias posturas y escojas aquella que realmente te permite un descanso adecuado.

No es necesario escoger una postura para dormir y no cambiarla jamás. Mientras dormimos, en las distintas fases de nuestro descanso adquirimos, de forma inconsciente, nuevas posiciones del cuerpo. Además, según determinados momentos o etapas de nuestra vida podemos necesitar o preferir dormir en una postura u otra. Por ejemplo, una mujer que habitualmente duerme en posición decúbito supino (boca arriba), durante el embarazo puede acomodarse mejor en posturas que impliquen una posición lateral del cuerpo. De igual manera, si presentamos molestias o dolores en la espalda, podemos optar por dormir boca arriba o de lado, según notemos que se alivia el dolor.

Contar con el mejor equipo para el descanso es esencial para una buena calidad del sueño, pero escoger la postura corporal que mejor se acomode a nuestras necesidades al dormir también es importante. En Morfeo, como especialistas en descanso, tenemos todo lo necesario para garantizar una buena calidad del sueño y la máxima adaptabilidad al dormir. Si quieres saber más sobre nuestros productos y sus características no dudes en contactar con nosotros, te asesoraremos en todo lo que necesites.