El secreto de la eterna juventud es dormir bien

Si eres una persona interesada en la cosmética y el cuidado de la piel, habrás escuchado muchas veces que el secreto de la juventud es dormir bien. Los mejores cosméticos se reservan para la noche porque es cuando la piel se regenera, para aprovechar mejor su efecto. No tienes más que mirarte al espejo tras un par de noches sin apenas pegar ojo para ver los estragos en tu cutis.

Pero esta afirmación estética se hace extensible a la salud y la calidad de vida. Puedes rejuvenecer con el mejor colchón porque te permite un descanso adecuado, el cual repercute en todo lo que te vamos a explicar a continuación.

Durante la Segunda Guerra Mundial se cometieron experimentos atroces e inhumanos, a raíz de los cuales se modificó la legislación internacional. Uno de estos experimentos consistía en medir cuánto tiempo resiste el ser humano sin dormir. El resultado obtenido fue que no se sobreviven más de 11 jornadas seguidas sin pequeños intervalos de duermevela.

Cuando alguien sufre un dolor intenso, ve cómo se resiente su calidad de sueño, y qué podemos decir en el caso de las personas aquejadas de dolor crónico. En ellas se ha observado un deterioro importante de la salud mental y un aumento de la frecuencia de casos de enfermedades como la obesidad y la hipertensión. 

La falta de atención y el riesgo de accidentes ocasionados por ello tampoco son un asunto de broma.  Llegando al punto de que muchos pacientes necesitan consumir calmantes muy potentes, prescritos por sus médicos, para poder descansar aunque sea mal. En las unidades del dolor conocen bien las consecuencias de un mal descanso prolongado.

Si tú no eres una persona con una patología que te impida descansar como es debido de manera habitual, aunque una noche de insomnio la puede tener cualquiera, ¿por qué vas a arriesgarte a enfermar o a sufrir dolores de espalda durante el día debido a un mal colchón?

La calidad del sueño es indispensable para un descanso reparador, tanto o más que las horas dormidas cada noche, dentro de unos márgenes razonables. Por eso decimos que el secreto de una eterna juventud está en dormir bien. Es mejor dormir 5 horas bien, aunque no sean suficientes, a 8 horas de sueño poco profundo, hablando en cuanto a las consecuencias para a salud a medio y largo plazo.

Y para dormir bien se necesita la temperatura adecuada, ropa que no oprima y un buen colchón. Con la firmeza adecuada a cada persona en función de su peso y de si presenta o no lesiones de espalda. La almohada también puede ser un elemento importante; por algo algunas se venden en farmacias y en ortopedias.

Si duermes en un mal soporte, debido a que el colchón es demasiado viejo o no es bueno, o a que la temperatura es demasiado elevada para descansar, te vas a levantar cansado. Además de irritable o somnoliento. 

Lo más seguro es que sientas algún dolor muscular, que tiende a repetirse hasta dar lugar a contracturas crónicas o a problemas que te hacen cliente habitual de un fisioterapeuta. Pero además tu piel se agota, tu mente se va deteriorando de manera irreversible con los años de sueño no reparador y tu caminar se ve, si se nos permite la expresión, cansino.

La piel se vuelve opaca, ojerosa y aparecen las arrugas y la flacidez mucho antes de lo debido. Todo ello mientras no tienes ganas de hacer ejercicio porque estás hecho polvo. A la vez que tu cuerpo intenta protegerse acumulando grasa y mostrando apetencia por los azúcares rápidos.  Son algunos de los síntomas que aparecen por no dormir bien,

 ¿Aún no crees que el secreto de la eterna juventud sea un buen descanso?